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Mi hija considera que es el mejor viaje de los que hemos hecho y está superorgullosa de él: EL VIAJE POR EUROPA
Javier
No siempre y no todo el mundo podemos permitirnos viajar con todas las comodidades que nos gustarían.
Yo estaba en paro para aquel entonces ya casi un año y no se veía la luz al final del túnel.
Me vencían la desesperación y la ansiedad. Otro día a día de búsqueda, miles ya de CV-s enviados y sin respuesta alguna....
El 5 de julio me dije: vamos a aprovechar la oportunidad de no depender del buen humor de ningún jefe para poder marcharnos y ver todo lo que buenamente podamos. La única diferencia entre estar en casa y marcharme va a ser el precio del carburante de mi coche... Y poder disfrutar del mundo y companía de mi hija que aquel entonces tenía 14 años el 100% del tiempo.
El día siguiente intenté sacar de la web toda la información posible, pero no ha sido la suficiente muy a mi pesar, como después me dí cuenta.
El día 7 a las 8 de la mañana salíamos por la de Burgos dirección a Francia. Mi coche tiene la capacidad de acoger a dos personas tumbadas en un colchón si abates los asientos de atrás y retranqueas al máximo los asientos delanteros. No es ningún hotel, pero durante más de un mes lo ha sido y no tan malo como temía mi niña. Plegamos un viscoelástico, lo atamos con gomas de equipaje, encima las bolsas con ropa y utensillos y - listo. En Madrid hacía como 40º C en sombra, así que no nos quedaba otra que ir en búsqueda del frescor nórdico.
España cambia mucho según avanzas en dirección norte, como seguro que todos sabéis ya. El párramo seco y quemado por el sol de la meseta central poco a poco se vuelve más verde y fresco a medida que uno se acerca a Francia. Ya en la frontera por nadie vigilada comimos lo que llevabamos de casa en un tupper. Mi meta para éste día era llegar al Futuroscope, pernoctar y por la mañana disfrutar del parque temático-científico, como creíamos. Y así fué.
En Francia, a diferencia de España, las carreteras que no son puramente de cabras, ya son de peaje. Eso sí, muy buenas. Puedes pisar el acelerador con un ladrillo, bloquear el volante y echar una siesta, el coche seguirá por la misma recta sin curvas ni cambio de rasante él solito hasta donde te decidas despiertarte. No obstante, no lo aconsejo, por si las moscas.
Y también a diferencia de España, el resto de Europa civilizada tiene en las areas de descanso de peaje los servicios completos para que no te sientas como un australopiteco. Puedes ducharte por sólo 2 euros por cabeza. Durante la noche a tí y a tu coche os están vigilando múltiples cámaras mientras estáis durmiendo a pierna suelta. Más de mil kilómetros de conducción cansan lo suficiente para que te duermas antes de caer en la improvisada pero muy cómoda cama. ¡Hasta nos poníamos los pijamas!
Buenas noches y seguimos el viaje mañana.
01/03/2012 18:16:49
Publicado hace 13 años en Viajar por Europa > Viajes por el continente