El verano pasado estuve un mes en Tenerife de vacaciones. Y, aunque parezca perogrullo, me fui 4 días de vacaciones a La Gomera. Sin duda, me gustó mucho más La Gomera que Tenerife. Otro encanto, otra gente, otro ambiente. Mucho más natural y la gente mucho más familiar. Hablaré de La Gomera, ya que estoy en ello. Fui a pasar las fiestas del Carmen a San Sebastián, y la verdad, encantada. Fiestas con orquestas por las noches y durante el día torneos de fútbol 7, actividades para los niños pequeños... Las playas, madre mía qué playas! Qué lujazo poder haber estado allí! Sin aglomeraciones, ni agobios. El Parque Natural de Garajonay es impresionante, bonitísimo. Ese día comí en Hermigua, en uno de los pocos restaurantes que hay y la comida buenísima. Desde este pequeño pueblo, se podía ver la parte norte de la isla, una playa (La Caleta) inmensamente linda. El Bosque del Cedro, meterse ahí dentro era algo mágico, me recordó a Galicia mucho. Un paisaje muy verde y muy húmedo, que daba como resultado aquello. Un bosque verde y mojado, increíble para estar en una isla de origen volcánico. Otro de los lugares que me dejaron prendada, fue la reserva natural de Benchijigua, fui a dos mirados en los que se veía parte de la isla y parecía que no había impacto humano en ella! Y una curiosidad, fue el momumento natural de Los Roques. Todo tenía un encanto muy especial. Muy mágico. Muy natural. Enamorada me he quedado de esta islita.

Publicado hace 13 años en Viajando por España > Islas canarias