Las "Pousadas" portuguesas son como los Paradores españoles, complejos hoteleros de primerísima categoría. La Pousada do Crato o Flor da Rosa ocupa un antiguo monasterio que ha sido adaptado a la modernidad y las comodidades que todo viajero exigente reclama una vez decidido a alojarse en un rincón como éste, de tanta categoría. Se dice que el monasterio fue antes la sede de la famosa Orden de Malta, que se instaló en Crato (Alto Alentejo) a principios del Siglo XII. Sin duda todo el entorno del complejo desprende historia y cierta dosis de misterio. A Crato desde España se puede llegar vía Caceres. Entre las actividades disponibles por la zona, se puede elegir paseos a caballo, asistir a un espectáculo de cetrería, pesca o visitar el Mirador A Penha de la Serra da Penha.

Publicado hace 11 años en Viajar por Europa > Portugal