El año pasado me fui de vacaciones a Benidorm, desde Málaga cogimos el coche con destino a Alicante, fue un viaje agradable, el paisaje cruzando Andalucía, Murcia, entrando a Alicante, nos gusto mucho ver esos pueblos, hasta que llegamos a Benidorm, nos hospedamos en el hotel, de 3 estrellas, era bueno, la piscina muy colapsada pero bien, la comida bufet, bastante buena. Empezamos nuestra ruta haciendo un recorrido por la ciudad a pie, subimos al mirador, es allí donde se aprecia muy bien la playa de poniente y la de levante, no sabía yo que se dividía en dos la ciudad. Estuvimos en la playa, nos volvimos porque allí no cavia ni un alma, madre mía! A sí que nos tuvimos que buscar otro plan, por cierto esto era las 10 de la mañana y en la playa no se cavia, eh? En fin, cogimos el coche y nos fuimos al parque acuático, esto sí que mola, es inmenso, de agua salada, tiene de todo, chulísimo, lo pasamos a lo grande, y allí pasamos el día, por la noche fuimos a pasear por el paseo marítimo y después en uno de sus restaurantes cenamos un pescado a la sal buenísimo, y después de marcha en sus muchos pubs que tienen en el paseo marítimo. Al día siguiente intentamos de volver a la playa, esta vez más temprano, y conseguimos de poner las toallas y bañarnos, el agua a tan temprana hora estaba caliente, no me gustó, pero bueno, estuvimos un rato en ella andando para adelante porque al ser tan bajita no había manera de nadar, jajajja, en fin que de vuelta a la toalla, no nos pudimos tumbar porque ya había instaladas junto a nosotros dos familias con niños, en mi toalla había un flotador de pato, la chancla de un niño, media nevera, en fin un caos que nos hizo recoger las toallas y volver al hotel, cuando llegamos aquí otra sorpresa fue, que de tantas tumbonas como tenía el hotel no había ninguna libre, la gente había madrugado y habían bajado a poner las toallas en las tumbonas para reservarlas, mi mujer y yo nos miramos y nos echamos a reír, no era para menos, así que bajamos a darnos un chapuzón aunque fuera para refrescarnos, nos cambiamos y nos fuimos a pasar el día a Terra Mítica, esto nos gustó mucho más, entramos a las cuatro y media porque valía la mitad menos y estuvimos hasta que cerraron a las doce de la noche, nos lo pasamos a lo grande fue un diversión total. Y el resto de días que estuvimos allí pues dimos paseos, fuimos de compras, y conocimos un poco la ciudad, y nada más, como experiencia no iré más a Benidorm de vacaciones, pero al parque acuático sí y a Terra Mítica también.

Publicado hace 12 años en Viajando por España > Este, Comunidad Valenciana, Cataluña y Aragón